Aquí, en España, Halloween se acaba cuando se te muere un ser querido cercano. Entonces vuelve a ser el Día de todos los Santos.
Y es que aquí copiamos ( y mal ) todas las americanadas habidas y por haber. Pero somos zafios y roínos y no tenemos ni la más pizca de gracia para hacer nuestras esas celebraciones absurdas y sinsentido. Ahora sí, tenemos gracia ignata para mandar a la mierda nuestras tradiciones más arraigadas.
Si aquí se hiciera el Halloween igual que allí, sería un desastre. Eso de que los niños lleven caramelos de una casa a otra, recogiendo su pequeña fortuna, en España no daría lugar porque unos a otros se los robarían en plena calle andando en bandas como pandilleros.
Y eso de tocar las puertas diciendo "truco o trato" sería una verdadera ruleta rusa, ya que en varias casas los raptarían para el tráfico de sus "organitos" prepuber o caerían en casa de algún pederastra o les darían los caramelos con laxante en el mejor de los casos.
Eso de abrir la puerta de casa y tener a un grupo coral cantándote un villancico aumentaría la venta de salfumant o lejía. Algunos horteras cantarían los villancicos a ritmo de hip hop o, peor, perreando con un reggaeton. Ya no te cuento nada del que lo cante imitando a Bunburry !
Los adornos de Halloween no se quitarían hasta bien entrado el verano dejando atrás un reguero de calabazas pochas y babosas llenas de moscas y gusanos de descomposición. Incluso los niños podrían sufrir confusión si un familiar muere en esos meses que los precede y se presentan en el crematorio preguntando "truco o trato"....
No innovemos que no tenemos gracia. Si os gustan los sustos es mejor esperar a final de mes para ver si la nómina viene entera o no viene...no?
No hay comentarios:
Publicar un comentario