EL (SIN)SENTIDO DE LA VIDA

Si la vida es un regalo a mi me ha tocado una mierda con olivas.
Y empeñarse en creer que la vida es bella es mentirse y ser deshonesto con uno mismo.
Ya de entrada estamos en un mundo que, según la religión cristiana, se hizo en seis días y "al séptimo descansó" con lo cual la chapuza fue fina. Además, ya nacemos con el pecado original, marcados para toda la vida. Somos pecadores, impuros y mediomierdas pero...atención! Dios, el que nos creó, nos quiere igual  ( aunque nos dé enfermedades, disgustos, tragedias y asfixia). Qué se puede esperar de alguien que crucificó a su propio hijo. Lo mínimo que puede hacernos es darnos por culo.
La vida es como un pedo caldoso. Te lo tiras, lo hueles, te repugna el fétido olor, pero te gusta pese a todo.

Si no eres religioso y crees en la evolción del hombre la cosa es bastante peor. Hemos tardado millones de años en ser quienes somos. Y te recuerdo que somos una mierda. Matamos, herimos, torturamos, criticamos, abusamos, maltratamos, insultamos..¿Dónde está la grandiosidad humana?
_ Pues el hombre ha llegado a Marte.
- No, bonito. A Marte ha llegado una sonda y los "Vampiros" de Carpenter. Y aunque hubiésemos llegado:
- He llegado a Marte. Antes de partir hacia el planeta rojo he violado a un neonato, he pegado a mis padres y he puesto una bomba en Marina Dór.....pero he llegado a Marte.

La vida no es un regalo, no. Es un pastel de mierda con una moscarda de la acelga coronando la plasta.
Me hace gracia los imberbes padres que con gesto de "rosita de pitiminí" dan la buena nueva a la familia de la heroicidad:
- "Familia, vamos a ser papás". Y todos lloran, se felicitan y, ya de entrada, piden al Señor que "venga bien" y no nazca "mongui" ni "lerele".

Felicidades, papás. Vais a traer al mundo a un ser sin futuro que nada más nacer le van a meter dos hostias en el culo,le van a pinchar y hacerle pruebas hasta la saciedad, va a tener que aprender a hablar, comer, controlar esfínteres, estudiar media vida ( media vida !!!!), estar en paro la otra media para finalmente trabajar cuatro días en condiciones de explotación y humillación por un mísero trabajo viviendo, en el mejor de los casos en un hogar de 70 metros cuadrados.
Después decís que el cruel soy yo. Qué cara más dura teneís.

Pese a las crisis, falta de amor en muchos casos, un mundo sin reglas, contaminado y empobrecido, donde los fuertes sobreviven al que es tan solo ligeramente más débil, en un mundo de corrupción en donde tenemos hijos, los mandamos al colegio y nos desentendemos de ellos responsabilizando totalmente al pobre profesor y distrayendo al niño con miles de actividades extraescolares pàra, según los padres, "hacerlo más competitivo en la dura Sociedad actual", seguimos trayendo hijos tan solo por un resquicio arcaico de "continuar la especie".

Es como si yo solo pudiera comer mierda y quisiera tener un hijo para que continuase la tradición.

Seamos serios. Esto es un fraude. Y pensar en el Sol y en las flores es ser estúpido. Y si no que le pregunten a un alérgico.